Las profecías de Daniel y la continuación de este libro de Daniel, que es el libro de Apocalipsis, nos revelan claramente mediante el surgimiento de bestias o fieras, los imperios mundiales que se sucederán en el mundo desde los tiempos del profeta Daniel, a saber: Babilonia (león de Daniel 7: 4; 605 a.C. - 539 a.C.), Medo Persia (oso de Daniel 7: 5; 539 a.C. - 331 a.C.), Grecia (tigre de Daniel 7: 6; 331 a.C. - 168 a.C.), Roma Militar (dragón de Daniel 7: 7; 168 a.C. - 476 d.C.). Roma Militar, representada por la 4ª bestia horrible y espantosa de Daniel 7: 7, tiene 10 cuernos (reyes conf. Daniel 7:24) que son las 10 tribus bárbaras que se sucedieron al derrocamiento del Imperio Romano Militar en 476 d.C., 10 tribus bárbaras que originaron Europa Occidental.
"He aquí que otro cuerno pequeño (el Obispo de Roma) subía entre ellos, y delante de él fueron arrancados tres cuernos (reinos) de los primeros; y he aquí, en este cuerno había ojos como ojos de hombre, y una boca que hablaba grandezas (con arrogancia haciéndose pasar por Dios)". Daniel 7:8 . "Y los diez cuernos significan que de aquel reino (la 4ª bestia Roma Militar) se levantarán diez reyes; y tras ellos se levantará otro, el cual será mayor que los primeros, y á tres reyes derribará". Daniel 7:24. Este cuerno o poder que es diferente a los otros 10 reinos, comienza pequeño y crece, ocasiona en su crecimiento el derrocamiento de 3 cuernos o reinos: los Hérulos, los Vándalos y los Ostrogodos. Los Hérulos en Roma e Italia que fueron conquistados por los Ostrogodos en 493 a.C. En 534, los Vándalos, que estaban bajo la influencia Ariana, fueron conquistados por los Griegos, con el propósito de establecer la supremacía de los Católicos." 5
Con dos de los tres reinos destruidos por completo, la atención ahora se centro en los Ostrogodos restantes, que estaban en control de Roma. Antes de su destrucción, un decreto del Emperador Justiniano fue emitido en 533 DC cual nombró al obispo de Roma como cabeza sobre todas las iglesias Cristianas, tanto en las divisiones del Este y Occidentales del Imperio Romano. Este decreto, sin embargo, no se pudo cumplir, mientras que los Ostrogodos Arrianos estaban en control de Roma. En 537 d.C. el Emp. Justiniano del Imp. Romano Oriental, sediado en Constantinopla, envía tropas al mando del General Belisario a Roma para exterminar a los Ostrogodos, lo que ocurrió efectivamente.
"El edicto del Emperador Justiniano, del 533 DC, hizo al obispo de Roma la cabeza de todas las iglesias. Pero este edicto no pudo entrar en vigor hasta que los Ostrogodos Arrianos, el último de los tres cuernos, fueron arrancados para dar lugar al papado, y fueron expulsados de Roma, pero no se llevó a cabo, como ya se ha demostrado, hasta el año 538. El decreto no hubiese tenido efecto si este último evento, no se hubiese llevado a cabo.." 6
Por la conquista de los Ostrogodos, y conducidos fuera de Roma, el Papa se convirtió en el gobernante facto de Roma, y la cabeza establecida sobre todas las iglesias Cristianas en el Imperio Romano.
Fue la victoria sobre los tres reinos Arrianos que estableció la supremacía del obispo de Roma como cabeza del mundo Cristiano. Estos 3 pueblos - que la Iglesia Romana se defiende diciendo que eran "arrianos" y por ellos la Iglesia causó que fueran derrocados - (Hérulos, Vándalos, Ostrogodos) - no reconocían al Obispo de Roma como cabeza y algunas fuentes creen que ellos habían recibido el evangelio directo de alguno de los apóstoles, por ello que no le darían nunca su supremacía al Obispo de Roma la cual se la daban únicamente a Cristo, pues dominaban muy bien el "Evangelio Eterno" (Ap 14:6) de Cristo.
Por tanto, el "cuerno pequeño" de Daniel 7, que comienza a se levantar de entre los 10 cuernos o reinos (tribus bárbaras) que se suceden al derrocamiento de Roma Militar, es el Obispo de Roma que comienza a gobernar en 538 d.C. como "Obispo Universal" o cabeza de todas las iglesias Cristianas que estaban dispersas por todo el Imperio Romano, además de los títulos que Emp Justiniano le diera de "Corrector de Herejes" (para corregir a los arrianos) y "Pontifex Maximus" que era el cargo que ejercía el Emperador Romano pagano como dios que era considerado, como un puente o intercesor entre las deidades paganas y el hombre en la religión de misterios babilónicos; título este último que fue adaptado para la religión del imperio, que dejó de ser mitraista en el Concilio Ecuménico de Nicea (325 d.C.) para ser luego de ese Ecumensimo de Nicea la religión católica romana sobre la cual ahora el Obispo de Roma ostentaba gobernar en todo el imperio romano, como continuación del Imperio Romano, ahora no más Roma Militar sino en su nueva forma de Roma Eclesiástica.
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