* La Doctrina del Santuario
La obra de Cristo en favor del hombre, contra el pecado, tiene 3 grandes fases:
1.- Su acto redentor consumado en la cruz por su muerte expiatoria
2.- lo que hace ahora en el cielo Cristo como nuestro Sumo Sacerdote - "ÚNICO MEDIADOR entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre" (1 Tim 2: 5) - ministrando los beneficios de la obra realizada en la cruz.
3.- Juicio del hombre
Mientras esas 3 fases de Su obra no fueran completadas, el pecado no podrá ser erradicado del mundo. La familia humana continuará sujeta a los males del dolor, del sufrimiento y de la muerte.
Si queremos tener una idea completa del Gran Plan de la Salvación, debemos estudiar el Santuario y sus servicios.
El Santuario es el Plan de Salvación ideado por Dios para lidiar con el problema del pecado. El santuario terrenal era una representación simbólica del plan de salvación y una copia en miniatura del Santuario Celestial en donde habita Dios. Por medio del santuario Dios quería representar de qué manera resuelve el problema del pecado, cada aspecto del santuario nos proporciona información con respecto al ministerio de Jesus en el Santuario Celestial.
- El Santuario
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- El Sábado y el Arca del Pacto
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Como vimos en el tema # 1 "El Santuario", el sistema de sacrificios se originó en el mismo huerto de Edén. Cuando Adan y Eva pecaron hubo necesidad de que Dios sacrificase a dos corderos para arrancar la piel de ellos y cubrir la desnudez de Adán y Eva, cubrirlos, simbólicamente, con la justicia de Cristo, del manto de Su justicia, pues el Cordero o Mesías prometido como nuestro Sustituto, vendría a vivir aquí en la tierra - simbolizado por el campamento en donde se encontraba el Santuario - en donde tendría una vida sin mácula, sin pecado, por ello que el cordero de sacrificio tenía que ser sin defecto. Una vez que hubo pecado, el hombre tenía que ofrecer una víctima para que fuera sacrificada en su lugar. Vemos en la Biblia como los antiguos patriarcas levantaban altares y hacían sacrificios. Así lo hicieron Adán - en la puerta de entrada al Edén - Abel, Job, Noe y demás patriarcas. Esta obra se limitaba al padre de familia. Él debía enseñar a sus hijos tres conceptos fundamentales involucrados con el perdón de pecados y que aún hoy son válidos y es lo que en Apocalipsis 14: 6 es llamado de "el evangelio eterno", conceptos que se practicaron durante todo el sacerdocio levítico del servicio del Santuario terrenal:
Evangelio Eterno (Apoc 14: 6):
1) que "Todo aquél que comete pecado, infringe también la ley; porque el pecado es transgresión de la ley" (1Juan 3: 4 RV); que "el salario o la paga del pecado es la muerte" (Rom.6: 23 Bib de Jerusalén), que "el alma que pecare, esa morirá" (Ezeq 18: 4, 20).
2) que "sin derramamiento de sangre no hay remisión de pecados" (Hebreos 9: 22), y
3) la necesidad de presentar a Dios un animal como sustituto del pecador, el cual casi siempre era un cordero, quienes debían confesar el pecado ante Dios, para lo cual la persona ponía sus manos sobre la cabeza del animal, confesaba su pecado y luego lo sacrificaba y con su sangre el sacerdote rociaba el santuario, demostrando que el pecado pasaba del individuo al animal y del animal al santuario. Esos pecados acumulados por todo el año contaminaban el santuario y era necesario un culto especial para purificarlo, que era a fin del año hebraico en el "día de expiación".
Israel, Salvo por la Gracia Mediante la Fe, Recibía el Manto de la Justicia de Cristo:
Como se observa, el pueblo de Dios en el Antiguo Testamento también era salvo por la gracia, al igual que ahora lo somos, por ello su nombre de "Evangelio Eterno" (Apoc 14: 6), gracia la cual el pecador la tomaba - se la apropiaba - mediante el brazo de la fe en el sacrificio sustitutivo del Mesías venidero que demostraba su fe mediante el rito del sacrificio que presentaba en el Santuario, que era sombra o figura del Cordero sin mácula, por tanto sin pecado del cual el pecador se cubría de Su justicia la cual la aceptaba por la fe al aceptar la provisión del sacrificio que haría el Mesías en forma sustitutiva al pecador arrepentido, la justicia del Cordero de Dios quien cargó en esa dramática noche en el Getsemaní los pecados de toda la humanidad por la cual Jesús moriría, pecados que lo separaron por completo del Padre, porque "el pecado provoca separación entre Dios y el hombre" (Isaías 59: 2) por ello se sintió totalmente desamparado Jesús en la cruz. Su muerte es una prueba irrefutable de que la Ley Moral de 10 mandamientos de Dios está vigente porque Él prefirió aceptar la penalidad de la Ley en su cuerpo a tener que alterar ni una jota ni un tilde de Su Ley, como via para salvar a la raza humana caída, la cual "es inmutable por ser la Ley reflejo de Su carácter, el cual también es inmutable" (Malaquias 3:6). Basta solo aceptar a Jesús como nuestro Salvador personal y Señor en nuestra vida, "no tener otros dioses ni señores (ni Papas) delante de Él" (1º Mandam. Éx. 20:3).
Israel al estar salvo, en agradecimiento a ello y para mostrar al mundo que era un pueblo peculiar de Dios comprado por la sangre de Jesús, el israelita guardaba la Ley de Dios, al igual que ahora lo hacemos el pueblo de Dios, el remanente de los últimos días, "el remanente que guarda los mandamientos de Dios (Éx 20 3-17, no "los mandamientos de hombres" o Catecismo) y tiene el testimonio de Jesucristo" (Apoc 12: 17)......"los que guardan los mandamientos de Dios y tienen la fe de ( y en) Jesús" (Apoc 14: 12): "porque fuistes comprado por buen precio, glorificad pues a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales pertenecen a Dios" (1 Cor 6: 20); "si me amáis, guardad Mis Mandamientos" (Juan 14: 15); "porque por la gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no viene de vosotros, pues es don de Dios, no por obras, para que nadie se gloríe, porque somos hechura suya criados en Cristo Jesús para las buenas obras, las cuales Dios preparó para que anduviésemos en ellas" [Efesios 2: 10 RV / Alm Corrig e Rev Fiel (pt)]. "No penséis que he venido para abrogar la ley ó los profetas: no he venido para abrogar, sino á cumplir." Mateus 5:17 Reina Valera. El Cordero de Dios que viviría en el campamento del Santuario terrestre y sería inmolado, debía ser "sin mácula", sin pecado.
El Día de Expiación ("Yom Kippur"):
En el servicio del Santuario, ese era el proceso por el cual había "remisión de pecados", usando el término "remisión" porque es eso lo que ocurría; "el pecado era transferido a la sangre del animal victimado" y finalmente era remitido al Santuario cuando el sacerdote rociaba con la sangre el velo del Santuario que separaba el Lugar Santo del Santísimo. El "día de expiación" a fin de año, día de purificación del Santuario" o "día del perdón" o "Yom Kippur" en hebraico, implicaba en un "día de juicio", que es lo que significaba ese día en que el sumo sacerdote entraba en el Lugar Santísimo del Santuario y realizaba la purificación del mismo, pues estaba contaminado, e intercedía por sus pecados y los pecados del pueblo de Israel que estaban registrados en el Santuario mediante los registros de sangre rociada sobre el velo durante el "tamid" o "diario" o "continuo" como era llamado al servicio diario de sacrificios. Este "día de Expiación" era un día solemne de juicio, feriado nacional y el pueblo todo se reunía afuera del Tabernáculo en contricción afligiendo su alma revisionando todos los pecados cometidos durante el año, si fueron confesados, a la expectativa que saliese del Lugar Santísimo el sumo sacerdote intercesor para presenciar el resultado del juicio, pues Dios inspeccionaba todos esos pecados del pueblo y verificaba si hubo confesión, arrepentimiento y abandono de esos pecados, de modo de que exista efectivamente el perdón de los mismos y eliminar así definitivamente el registro de sangre del Santuario terrenal, que equivale a borrar los registros de esos pecados en el Santuario Celestial en el Juicio de Investigación que se halla realizando ahora Jesús.
El Gran Día de Expiación Escatológico: (1844 d.C. hasta cierre puerta de gracia)
Este "día de expiación" o Yom Kippur en el santuario terrenal, era una figura o sombra o "tipo" del antitipo en el Santuario Celestial del "Gran día de Expiación Escatológico" o "Juicio de Investigación o Juicio pre-advento" que está ocurriendo actualmente en el Lugar Santísimo en el Santuario Celestial, juicio que se inició en el inicio de la "Iglesia de Laodicea" (del griego: "pueblo o iglesia del juicio") en 1844 al término de los 2300 días-años de Daniel 8: 14, fecha que marca el inicio de la purificación del Santuario (Juicio pre-advento), y que comenzó por los muertos del profeso pueblo de Dios y que, terminando con el juicio a los muertos se iniciará el juicio a los vivos para después retirar el Espíritu Santo de la tierra, se cierra la puerta de la gracia pues se termina la intercesión sacerdotal de Cristo en Su Santuario, se derraman las 7 plagas sobre aquellos que reciben la marca de la bestia y Cristo viene a la tierra con Sus ángeles como Rey de reyes y Señor de señores para la "cosecha final de los frutos de Su trabajo porque la mies de la tierra ya está madura" (Apoc 14: 15), ya se formaron los dos grandes grupos: "los que recibieron la marca de la bestia" (Ap. 14: 9-11) y "los que fueron sellados con el sello de Dios" (Apoc 7: 1 - 4). Ya Jesús determinó el número de súbditos que tendrá su reino que Él recibiera del Padre en el inicio del juicio en 1844 en el Lugar Santísimo, súbditos de Su reino que "reinarán con Cristo durante mil años" (Apoc 20: 4) en el cielo durante el milenio que tendrá lugar antes de morar en la Tierra Nueva y Cielo nuevo (Isaías 66: 22,23), luego de eliminado el pecado y los pecadores y purificada la Tierra por fuego, conforme Apoc 20 lo describe.
Aquí, la historia del pecado y del gran conflicto milenar entre Satanás y Cristo, alcanzará su final feliz y glorioso, final que contempla la justicia y la misericordia de Jesús - las cuales se besaron en la cruz - que quedará patente y registrado en todo el vasto Universo con esta frase:
“Y a toda cosa creada que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y sobre el mar, y a todas las cosas que hay en ellos, las oí decir: ¡Bendición, y honra y gloria y dominio al que está sentado sobre el trono, y al Cordero, por los siglos de los siglos!” Apocalipsis 5:13 (VM). {CS 657.2}
"El gran conflicto ha terminado. Ya no hay más pecado ni pecadores. Todo el universo está purificado. La misma pulsación de armonía y de gozo late en toda la creación. De Aquel que todo lo creó manan vida, luz y contentamiento por toda la extensión del espacio infinito. Desde el átomo más imperceptible hasta el mundo más vasto, todas las cosas animadas e inanimadas, declaran en su belleza sin mácula y en júbilo perfecto, que Dios es amor". {CS 657.3} El Conflicto de los Siglos, pág 657, E.G. White.
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